Comienza la temporada invernal en Sudamérica y sin dudas una de las preocupaciones que atañe a patrulleros de esquí y rescatistas de montaña son los peligros potenciales que encierran los centros de esquí y poblados aledaños a zonas montañosas con peligro de avalancha.
No podemos pretender que los habitantes de una ciudad o poblado, lleven consigo un ARVA o bien posean un reflector RECCO entre sus ropas, pero sí en centros invernales de esquí y snowboard, éstos sistemas cada vez son más utilizados por entusiastas de deportes invernales quienes consientes de su seguridad personal no solo en actividades fuera de pista, sino también en circuitos tradicionales, están utilizando sistemas de detección pasivos y activos para este tipo de eventualidades.
Ahora, como profesional del rescate o esquiador, imagínese que uno de sus compañeros ah sido atrapado por una avalancha. El ARVA que usted lleva consigo lo ah ayudado a llegar al punto de localización de la víctima en minutos; su sonda de rescate penetra la nieve revuelta y súbitamente golpea algo solido y usted comienza frenéticamente a escavar para encontrarse finalmente con una roca o un tronco arrastrado por la avalancha.
Por suerte hace tan solo dos años, la empresa alemana ORTOVOX, pionera en sistemas ARVA desde hace 28 años; ah diseñado una sonda inteligente para avalanchas que reduce las posibilidades de equivocación a la hora de escavar en la nieve cuando los minutos realmente cuentan.
La sonda inteligente (Intelligent Probe) incluye un transceptor que alerta en forma audible cuando la misma se encuentra cerca de un ARVA, ergo, una víctima.
Al rotar la sección baja de la sonda, el sistema se enciende. Un receptor interno toma la señal de la víctima y un transceptor emite la señal cuando la sonda se encuentra dentro de los 50cm. de proximidad del ARVA. Esta pequeña distancia de recepción, lo ayudará a cavar en el lugar preciso donde la víctima fue enterrada y lo guiará lo más próximo a la zona superior del cuerpo de ella, para poder darle oxigeno rápidamente, ya que los ARVA suelen situarse en la zona superior del pecho dado el formato del arnés provisto.
La sonda inteligente es compatible con todas las frecuencias estándar de los receptores ARVA, es por ello que al recibir una señal positiva, ésta es enviada a un altavoz, el cual emite una serie de ¨Beeps¨, los cuales se tornan cada vez más constantes al aproximarse al ARVA.
La punta de 47cm. de la sonda inteligente solo pesa unos 114grs. gracias a su construcción en fibra de carbono. La misma se guarda de la misma manera que cualquier sonda convencional y puede ser adicionada a una serie de 9 sondas de la línea Ortovox compatibles con ésta (nosotros recomendamos las de fibra de carbono por su rigidez y bajo peso). Funciona con 2 baterías AAA, las cuales se insertan desenroscando la punta de aluminio de la sonda y éstas están protegidas del frio gracias a un aislante especial, para no perder energía en las pilas por las bajas temperaturas de operación.
La sonda inteligente cuesta alrededor de unos U$D 85.- dólares y se adiciona a las sondas Ortovox en segundos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario