Técnica: Trabajando en un Alud

Un gran número de consultas nos han llegado a nuestro correo debido a la llegada del invierno en el sur de nuestro continente y a temporadas de lluvias en muchos de estos países. Una pregunta frecuente que hemos notado es ¨Como trabajar en un Alud durante un rescate y estar seguros que no colapsará nuevamente cuando estamos operando en él?¨

Debido a esto, decidimos hacer este breve artículo que describe algunos de los conceptos básicos a tener en cuenta a priori en estos casos específicos de rescate.

Primero  es conveniente diferenciar dentro de un desastre de este tipo a los 3 grandes efectos terrestres que pueden cambiar fácilmente la topografía de un lugar y que suelen ser muchas veces confundidos entre si.

Alud: Un alud es una masa de tierra y sedimentos en movimiento, apreciable a simple vista y de dimensiones significativas. Se entiende por alud al desprendimiento de una masa de tierra de dimensiones y recorrido variables por una pendiente negativa. Según el grado de cohesión y el estado físico de la tierra, el tipo de alud será diferente.

Avalancha: Con las mismas características de un alud, pero provocada por la acumulación de nieve, calidad de la misma, condiciones climáticas e inestabilidad del terreno. Esta también puede ser provocada por vibraciones de esquiadores, terremotos y más comúnmente por el estado en sí de la cobertura e integridad de la nieve al someterse a temperaturas más altas de lo usual (según la temporada), la caída de intensas lluvias y la calidad del cristal de hielo que compone la misma dentro de los rasgos generales. Una avalancha; al igual que un alud o un aluvión, puede destruir, arrasar, atrapar y sofocar tanto estructuras como personas. Las avalanchas se dan solamente en terrenos montañosos y por supuesto con las condiciones climáticas y temperaturas que hagan de este, un lugar de fácil acumulación de nieve.

Las avalanchas en lugares habitados o centros invernales, tienen la ventaja de poder ser medidas y controladas por parte de expertos y mediante diversas técnicas. Por lo general con el uso de explosivos, éstas pueden ser controladas y evitar así una excesiva cantidad de acumulación de nieve que pueda desmoronarse y correr por una ladera en forma descendiente a velocidades que (según el terreno y acumulación de nieve) han llegado a superar fácilmente los 160km/h. La construcción de sistemas de para-avalanchas a logrado en varios países (principalmente en Europa), contener y evitar éstas en centros invernales y poblados en valles montañosos.

En el caso de una avalancha, como también un alud, es sumamente importante ante la presunción de un posible deslizamiento de tierra o nieve se evacue a toda persona que se encuentre en el camino natural de estos desplazamientos, los cuales generalmente se dan en grandes laderas empinadas, cañones o desaguaderos o directamente debajo de estructuras nevadas o de tierra (por ejemplo acantilados) que denoten inestabilidad morfológica.

Aluvión: Un aluvión se define como un río de barro líquido originado tras una fuerte lluvia o deshielo que ocasionan inundaciones o también como resultado de un terremoto o erupción volcánica. Arrastra consigo limo, arena, rocas, entre otras cosas. Puede viajar sin aviso varios kilómetros desde su origen y a una gran velocidad. En su recorrido puede aumentar de tamaño a medida que arrastra árboles, basura e incluso vehículos.

Un aluvión al igual que un alud y una avalancha, puede provocar consecuencias fatales en el medio y también a aquellos que lo habitan; derrumbes ocasionados por rocas o tierras al descender a gran velocidad por una ladera, puede destruir todo lo que esté a u paso, instalaciones eléctricas, de gas, agua, alcantarillado, etc. Uno de los grandes problemas que presentan los aluviones es que son muy difíciles de predecir y se desatan sin aviso, por lo tanto es importante tomar ciertas precauciones en caso de que un aluvión se presente. Los aluviones siempre se originan en los mismos lugares, por lo tanto aquellos sitios deben tener planes de evacuación que al menos tengan dos rutas de escape. La vegetación debe ser plantada baja en laderas y es importante construir muros de retención como también construir canales para dirigir el flujo alrededor de edificaciones.

En caso de que el aluvión ha llegado totalmente de sorpresa, es importante alejarse de la trayectoria del aluvión y dirigirse al lugar más alto que se pueda. Tras haber acabado el aluvión, es importante alejarse de la trayectoria del derrumbe, pues tras éste fenómeno pueden venir derrumbes adicionales o una inundación.

Hecha esta breve pero importantísima aclaración, prosigamos con el alud.

Los elementos de peligro durante un Alud son: 

1. El ángulo del deslizamiento de la tierra. Cuanto más pronunciado es, más frágil y factible de que colapse nuevamente.
2. El contenido de humedad. A mayor cantidad de humedad ambiente y humedad contenida en la tierra misma (más allá del nivel usual del suelo en el terreno), el material interno que compone el alud será más inestable. Un suelo húmedo o con un contenido alto de agua es muy peligroso.
3. La composición del suelo. Un suelo con bajo nivel de cohesión es altamente frágil. Una Buena mezcla de arcilla y arena en el compuesto general de un suelo, agrega mayor capacidad de filtración del agua siendo este el mejor tipo de suelo en términos de estabilidad y cohesión.
4. Mezcla de elementos externos. Cualquier tipo de elementos externos mezclados con la tierra durante un alud, hacen que este sea mucho más inestable. Este es el caso de un árbol o un grupo de arboles o bien una estructura edilicia parcialmente colapsada en la pila del alud.

La manera de decidir cuando un alud es seguro puede ser primariamente observando las circunstancias inusuales que afectan al terreno. A través de un simple testeo, tome varias muestras del suelo en distintas secciones del alud, colóquelas en su mano y cierre el puño fuertemente y luego abra su mano rápidamente. Si no ha escurrido agua por sus dedos o puño y si la tierra quedó compactada con el formato de su palma cerrada, es una buena señal de escurrimiento y drenaje del terreno, pero sobre todo de las buenas características de cohesión del material del suelo, siendo este es un terreno bastante seguro.

Este tipo de suelos puede ser trabajado en ángulos de hasta 80° grados en algunos casos; sin embargo éste debe estar libre de cualquier tipo de precipitación y/o vibraciones del terreno (terremoto, retro excavadoras, maquinaria vial, etc.).

Si un suelo de esta calidad está a ángulos inferiores a los 60° grados, entonces usualmente es seguro ante vibraciones o mayor nivel de humedad siempre y cuando no haya materiales externos peligrosos como nombramos anteriormente.

Como un dato importante es conveniente observar el escurrimiento natural del agua, observando debajo de la colina formada por el alud, acumulación de agua, cascadas en los lados de la misma, etc. Un buen drenaje hace del terreno un sitio mas seguro.

Otros datos a tener en cuenta: 

1. Si el agua escurre por su palma y dedos con la técnica de muestreo descripta anteriormente, entonces ese terreno es solo seguro para trabajarlo en ángulos menores a los 40° grados.
2. Si la tierra escurre entre su mano y queda como una maza arcillosa o barro totalmente compactada y mojada, entonces este terreno será peligroso en cualquier ángulo de trabajo. Aun en un terreno llamo, usted corre riesgo de muerte si un nuevo deslizamiento ocurre y por la vibración éste se liquidifica.

Estas consideraciones fueron aprendidas en centenares de aludes donde equipos de rescate han trabajando alrededor del mundo. Comprenda que aun un alud puede absorber parte de la energía de un terremoto de las casas o edificios que estaban arriba de ese terreno, es por ello que bajo algunas circunstancias las personas pueden sobrevivir por un largo periodo dentro de esas estructuras si estas tienen cañerías, chimeneas u otras vías para prevenir la sofocación cuando sus casas quedan cubiertas por el alud. Existe un caso documentado en Colombia, donde una mujer sobrevivió más de un mes atrapada en su hogar durante un alud.

Si bien esta información es bastante genérica, le recomendamos la búsqueda de material técnico al respecto de este tipo de rescates. Lo que intentamos describir en este articulo, son solo algunos de los básicos a tener en cuenta ¨a priori¨ al arribo al escenario del desastre. La utilización de  ingenieros, geólogos y especialistas es más que recomendada para este tipo de misiones.

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