Muchas
veces hemos posteado en el Blog GOER distintas noticias sobre productos que recibieron
un ¨Recall¨ de parte de sus fabricantes para así poder alertar a nuestros lectores
sobre potenciales peligros; pero esta semana debido a una pregunta de uno de
nuestros lectores, caímos en la cuenta que muchas personas desconocen de esta práctica
empresarial y por ello decidimos hacer este breve articulo para concientizar a
todos sobre este tema.
En
cualquier cadena de fabricación de un determinado producto, los defectos de fabricación
y/o de diseño son entendibles, sin embargo las empresas son responsables de comunicar
a todos sus clientes o usuarios afectados (a través de un llamado) de las
posibles reparaciones preventivas o bien el descarte definitivo de esa pieza o
equipamiento. A este ¨llamado¨ se lo denomina internacionalmente ¨Recall¨.
El Recall
es la comunicación que la empresa fabricante de un producto le hace llegar a su
cliente sobre alguna anomalía o defecto que presenta el producto en cuestión. En
tiempos que tanto se escucha hablar de “responsabilidad social empresaria”
podríamos decir que el recall es la acción básica que realiza una compañía para
demostrar su interés y cuidado por el cliente.
En el caso de
los equipos de escalada o recate en altura, por tratarse en sí de sistemas no
muy complejos con una cantidad reducida de partes; la posibilidad de que se
genere alguna falla repetitiva en cualquiera de sus componentes es poco factible.
Sin embargo, esto puede ocurrir a pesar de los
controles y cuidados que tengan
los fabricantes en conjunto con la cadena de producción o manufactura. Cuando
ello ocurre y la producción se ha vendido, lo correcto es que la empresa genere
un recall más aun en este tipo de productos, ya que están diseñados básicamente
para sostener la vida no solo de potenciales víctimas, sino también la de los
operadores que los utilizan.
Los recalls
pueden comunicarse por distintos medios: solicitadas en los diarios, cartas personalizadas
a los clientes, llamados telefónicos o el medio que la empresa considere pertinente
dependiendo del producto y de la gravedad del defecto. También los alcances de
los recalls son diversos. Estos van desde el retiro de la venta del producto
hasta una citación para la corrección del defecto o simplemente, por una
recomendación de precaución en su uso. En un primer momento uno puede pensar
que una empresa que comunica a sus clientes los problemas detectados en sus
propios productos está cometiendo un “suicidio comercial”. Todo lo contrario.
Está demostrado que este tipo de acciones realizadas oportunamente, en forma transparente
y de cara al cliente hacen que el comprador se sienta protegido por la empresa
y se lo reconozca con su confiabilidad y fidelidad. Importantes firmas como
PETZL, KONG, SMC, MAXIM, BLUE WATER y muchas más, han realizado algún recall de
producto en los últimos 5 años.
Los recalls
pueden ser costosos para la empresa y hasta convertirse en una verdadera
pesadilla pero, si están bien hechos, sus réditos superan ampliamente la
inversión. Los verdaderos problemas pueden comenzar cuando el fabricante sabe
que su producto tiene un defecto repetitivo y trata de ocultarlo, o lo que es
peor, lo niega. En ese caso se expone a ser descubierto; y en ese caso tendrá
dos problemas: por un lado, hacerse cargo de la situación y por el otro lado,
tendrá que dar explicaciones extemporáneas.
Para
fortuna de los consumidores, hoy existen diversos entes de “defensa al consumidor”
donde exponer los reclamos y una prensa globalizada que rápidamente propaga las
informaciones.
Las responsabilidades
de los proveedores cuando éstos han introducido al mercado productos nocivos o
peligrosos a la salud o la seguridad, muchas veces es penado en muchos países si
las empresas dan aviso a las autoridades competentes y a los usuarios. En nuestro
país hay un vacío legal al respecto, ya que habiendo consultado a la
Subsecretaría de Defensa del Consumidor nos confirmaron que si bien la Ley N°
24.240 de Defensa del Consumidor en el capítulo 2 establece las responsabilidades
de los proveedores, no se especifica cómo deberán hacerse y comunicarse los
recalls.
Con
beneplácito, observamos que varias páginas en Internet de fabricantes de
equipamientos de rescate, informan debidamente a los usuarios sobre los recalls
vigentes.
En general,
tanto las fábricas como los importadores argentinos son reacios a dar
información cuando se las consulta sobre este tema. Por ejemplo, para esta nota
hemos enviado en tres oportunidades un cuestionario algunas marcas que fabrican
y comercializan o distribuyen equipos de rescate en altura nuestro país y en Latinoamérica
preguntándoles cómo comunicaban sus recalls y cuántos habían realizado desde el
año 2012. Luego de estos tres intentos sólo hemos tenido unas muy pocas
respuestas. Y algunas de ellas, poco afortunadas.
Una conocida
empresa brasileña nos contestó que “por política de la empresa no podemos dar
información sobre este tema específico”. Parece que no ocurre lo mismo con una
afamada marca Francesa, donde sus recalls están publicados en su página de
Internet. Ahí en donde se ven las diferencias entre las políticas empresariales.
Señores
clientes, fabricantes e importadores, mi abuela solía decir “el que hace se
equivoca”. Por eso, no hay que alarmarse cuando algo sale mal. Lo recomendable en
esos casos es tomar el toro por las astas, dar la cara, reconocer el error y
solucionar el problema. Los clientes y la sociedad saben apreciar quién los
protege y quién sólo se limita a venderles un producto y para nosotros como
consumidores, asumir la responsabilidad de estar al tanto de las nuevas tecnologías,
desarrollos y desde ya recalls de los sistemas o aparatos que utilizamos día a día
en nuestras tareas de rescate.
Aquí algunos ejemplos de Recalls que hemos posteado en nuestro Blog en el pasado: ATENCION!: Recall de Petzl GRIGRI 2 y ATENCION: Recall de NEW ENGLAND ROPES (MAXIM) sobre cuerdas.
©2013 GOER
1 comentario:
excelente informacion. gracias!!
Publicar un comentario